La Sierra de Francia (La Alberca y más)

Voy a hablaros de uno de los lugares de más belleza que he visitado: La Sierra de Francia-Las Batuecas.
Relamente he podido pasar unos días encantadores, tanto por los pueblos que he podido ver como por la Naturaleza que los rodea. Estuve alojado en La Alberca en el hotel Doña Teresa un buen 4*, recomendable 100%.
Llama la atención la arquitectura de sus casas tradicionales, hechas de granito y piedra, con las vigas de madera vista y con un máximo de tres pisos de altura. La Plaza es un verdadero encanto con soportales a izquierda y derecha. Si hace buen día muy recomendable es sentarse en alguna terraza y disfrutar de una buena ración de jamón, que aquí como en todo Salamanca es espectacular. Pasear por sus calles empedradas es algo que se recordará.
Una las costumbres más llamativas es el rito de difuntos. Todos los días al oscurecer, recorre el puebo la esquila de las ánimas, que lleva una mujer y que toca en todas las esquinas a la vez que entona un rezo por las almas. La primera vez impresiona.

Un pueblo cercano que tuve la oportunidad de recorrer fue San Martín del Castañar, situado en una especie de atalaya desde la que se domina el curso del río Francia.
Calles estrechas, pequeñas y plazas acogedoras invitan a la tranquilidad. Su castillo medieval, del que se conserva la Torre del Homenaje y el arco apuntalado de la entrada, así como la muralla son otros atractivos del pueblo.

Continuamos viaje para visitar uno de los pueblos más pintorescos de la zona: Mogarraz, situado en pleno corazón de la serranía.
La mayor belleza, sin duda se encuentra en el trazado de sus calles estrechas y los balcones repletos de tiestos.
Y si os ha dado la hora de comer, aparte de seguir disfrutando de los embutidos, no dejeis de probar las patatas meneás o el hornazo (empanada de embutido).

Otro lugar interesante es Miranda del Castañar, situado en un promontorio, el pueblo esta rodeado por una muralla que se conserva casi en su totalidad. El recinto contiene el núcleo original, situándose el castillo en el único lugar natural accesible. Enfrente encontramos la plaza de toros, que es rectangular y la más antigua de España. Su encanto, como el de la mayoría de las villas de la zona es recorrer sus calles. Podéis empezar por la calle Derecha donde se encuentran la mayoría de las casas blasonadas (se cuentan hasta 90) y bajar por las calles perpendiculares hasta el camino de ronda de la muralla. Una parada especial lo merece la Plazuela del Altozano. Tener en cuenta que la mayoría de las calles "bajan" hacia la muralla, por lo que regresar al centro es un poco duro, pero esto es parte del encanto.

Otros muchos lugares por visitar, pero es mejor en cualquier caso descubrirlos por vosotros mismos, merecerá la pena.